miércoles, 30 de diciembre de 2020

2020, un año repleto de aprendizajes.

Un año que nos hizo tomar conciencia de la fragilidad como seres humanos y nuestra efímera existencia en esta tierra.

Saludábamos por la calle a personas que no conocíamos como gesto de cordialidad y empatía. A última hora de la tarde agradecíamos a los profesionales de la salud su buen hacer y dedicación al tratar a pacientes de Covid-19 con los medios que disponían.

Experimentamos con el teletrabajo como herramienta para poder seguir prestando nuestros servicios en tiempo de crisis. La tecnología hizo posible nuestros encuentros virtuales.

Las ONGs recibieron infinidad de solicitudes de voluntariado que respondían al deseo de querer hacer algo por los demás. De aportar nuestro granito de arena en la construcción de una nueva sociedad más solidaria en la que los problemas de otras personas tienen que ver con nosotros.

Temporalmente unimos nuestros corazones para sentir que en el fondo somos Uno, aunque en la forma aparentemente somos muchos y separados. 2020 nos abrió los ojos aportándonos una nueva forma de ver las cosas y lo hizo en formato de crisis ya que es “a palos” como aprendemos y ha sido así desde hace miles de años.

2021 se nos presenta con grandes oportunidades para evolucionar. No caigamos en el “efecto Navidad” al pensar en clave de amor solo un par de días al año para olvidarnos los 363 restantes.

El cambio social es posible y es mi responsabilidad. Si yo cambio, todo cambia.

Mis pensamientos amorosos son la luz del mundo.

domingo, 29 de noviembre de 2020

La noche oscura del alma

Eres plenamente libre de elegir seguir sufriendo en el sueño de este mundo. Has creado un drama en el que eres guionista, director y actor principal. Y seguirás sufriendo encarnación tras encarnación hasta que te canses de sufrir. La pelota rebota al llegar al suelo.

Gritarás: “Basta ya!!! Nada de esto tiene sentido para mí. No sé ni de dónde vengo ni hacia dónde voy. Nací para morir y luego, ¿qué? ¿De qué me ha servido acumular títulos, riquezas o amistades si todo lo voy a perder? He conseguido lo que me he propuesto ¿y qué?”

Con lágrimas en los ojos, desazón y una terrible sensación de soledad sentirás un frio que te recorrerá anunciando que ya has tocado fondo. Es la llamada “noche oscura del alma”, un punto de ruptura en tu vida. Una gran oportunidad para buscar otro camino.

En ese proceso de introspección si quieres puedes escuchar la esperanzadora voz del Espíritu Santo que te susurrará: “No estás solo. Estoy aquí contigo. Siempre lo he estado. Si quieres, te puedo mostrar una nueva forma de ver las cosas. Tú decides”.

Y es ahí donde puedes abrir la mente y con Su guía empezar a comprender que el sufrimiento es exclusivamente tuyo y no tiene que ver con lo que ocurre en el exterior (relaciones y situaciones). Tu culpa inconsciente, que es el combustible del ego, es el origen del sufrimiento. Tu ciénaga interior alberga heridas no sanadas. Sus lodos ocultan la Luz de tu Ser.

Al igual que a un niño pequeño se le lleva de la mano, con el Espíritu Santo recorrerás la película de tu vida deteniéndote en las escenas más dolorosas. Juntos visualizareis de nuevo lo que ocurrió pero en esta ocasión Él te ayudará a comprender que esa persona que fue contra ti lo hacía porque estaba mal ya que era presa del miedo. A su manera, estaba pidiendo Amor.

Y con esta nueva visión es posible que te caigan las lágrimas al sentir una gran paz. Ahora ya lo has comprendido al disponer de una nueva percepción de la situación. Este es el verdadero perdón del que habla Un Curso de Milagros. El milagro es convertir el miedo y resentimiento en Amor. En esto consiste la sanación interior.

Al liberarte de ese fragmento de culpa inconsciente que te hacía sufrir, desde tu interior se emanará más Luz al eliminar una capa del lodo que la tapaba.  Te sentirás un poco más en paz. Y el Espíritu Santo colapsará el tiempo al suprimir de tu pasado y futuro las situaciones que has creado y crearás relacionadas con ese fragmento de culpa inconsciente. Tenías previsto atraer relaciones para proyectar sobre las personas esa culpa inconsciente que te hacía sufrir.

Ya estás más cerca de tu liberación de las cadenas del ego. Has acortado el camino que te falta para iluminarte. Es así de sencillo pero muy costoso por la resistencia del ego a desaparecer y nuestra inercia psíquica al llevar miles de vidas siguiendo los dictados del ego.

Cuando te venga un pensamiento de miedo, juicio, crítica o ataque contra otro, o contra ti mismo, detente y recuerda que a tu lado está el Espíritu Santo para darte una nueva visión de la situación desde los ojos de Amor. Basta con decirle mentalmente: “Espíritu Santo quiero ver esto de otra manera” y déjalo en Sus manos.

sábado, 28 de noviembre de 2020

Aquí jamás hallaremos paz, salvación ni amor

"Como Sísifo, todos estamos en un viaje que conduce a una sensación de futilidad y depresión. Por más que nos esforcemos en lograr nuestras metas, nunca lograremos llevar la roca a la otra ladera de la montaña. Nuestro fracaso significa que aquí jamás hallaremos paz, salvación ni amor; jamás hallaremos nuestro hogar (...) Sísifo es la figura de un mito griego. Fue condenado por los dioses a empujar una roca montaña arriba que al llegar cerca de la cima volvía a rodar hacia abajo, con lo que Sísifo tenía que volver a iniciar sus esfuerzos" (Kenneth Wapnick)

Opino que mientras subimos la roca (vivir en este mundo) podemos sentir que hay otra forma de ver el camino, desde los ojos del Amor, a través del verdadero perdón. Y esa es precisamente la salida de este círculo de reencarnación y sufrimiento.
 
Sísifo, que en el fondo somos todos, tenemos la oportunidad de ser felices aquí y ahora, aun cuando nos toque empujar la roca montaña arriba, si somos capaces de cambiar nuestra percepción.

jueves, 26 de noviembre de 2020

Confía, estás conmigo


El Padre nos mira con sus compasivos ojos y dice:

"Querido hijo mío, no te preocupes, no pasa nada, ni nunca pasó. Tu alocada idea de separación no rompió nuestra Unidad ya que el Amor no se puede dividir. Ese pensamiento solo duró un breve instante y ya se reparó. Mas tú como hijo mío, al tener todo mi poder, en ese momento creaste esta locura de universo en el que crees vivir un sueño de miedo, sufrimiento y muerte. Confía, estás conmigo cantando la eterna melodía del Amor"

domingo, 4 de octubre de 2020

Amistad perruna

Un perro al mirar a su anciano amo:

“Donde vayas te acompañaré. Soy tu fiel e incondicional amigo perruno. Da igual tus arrugas, tus pasos lentos y tu eventual mal humor ya que siempre cuentas conmigo. Nuestras vidas están entrelazadas. Estaremos juntos hasta el final de nuestros días. Te quiero!!!”

sábado, 19 de septiembre de 2020

¿Cómo estás?


Esta pregunta que antes del coronavirus la hacíamos por cortesía ahora la hacemos de corazón mirando a los ojos. Nos interesamos de verdad por la salud del otro. Esta pandemia nos ha motivado a estar más unidos que nunca como Humanidad.

Un futuro incierto nos ha hecho tomar conciencia que la vida en esta tierra es corta, muy corta, y se puede acabar en cualquier momento, al menos en este avatar de cuerpo con el que elegimos encarnar.

Para mí, lo importante no es la cantidad de años que vivamos sino más bien cómo hemos aprovechado el tiempo que pasamos aquí.

Hagamos como los buenos estudiantes que, en vez de estar distraídos en clase, aprovechan las lecciones que se les presentan en forma de experiencias para ir despejando las barreras que le han puesto al Amor a través del verdadero perdón.

Da igual la edad que tengas, nunca es tarde para iniciar el camino del Amor.

miércoles, 16 de septiembre de 2020

El sentido de la vida

 El discípulo le preguntó a su maestro: 
- ¿Qué sentido tiene esta vida?

Y el maestro le contestó:
- Tiene el sentido que le quieras dar.

sábado, 12 de septiembre de 2020

Elegir la voz que queremos seguir

Normalmente elegimos escuchar en la mente, ya que así llevamos haciéndolo toda la vida y muchas más…, al estridente y ensordecedor ruido del ego que nos incita a enjuiciar, criticar y comparar a todo lo que nos rodea, y también a nosotros mismos, debido a la culpa inconsciente. Es un ruido cansino y aburrido que nos lleva al sufrimiento.

También tenemos la opción de escuchar a la susurrante y melodiosa voz del Espíritu Santo, o nuestro Ser Superior, que nos ayuda a reinterpretar las circunstancias como peticiones de Amor que realmente son. O nuestros miedos más profundos como algo ilusorio que forman parte de la película de conflicto y muerte que nos hemos montado, dirigido y protagonizado ya que nada puede alterar nuestra esencia original que es puro, infinito y eterno Amor.

Y la pregunta que nos hacemos: ¿cómo puedo saber quién me habla: el ego o mi Ser?

El ego es muy hábil y se cuela por las rendijas más pequeñas para disfrazarse de nuestro verdadero consejero. Hay que estar muy atentos. Un Curso de Milagros dedica más de 1.000 páginas a descubrir y desenmascarar la estrategia del ego que nos lleva al estado de desesperación y confusión en el que estamos.

Según el fondo del mensaje transmitido podemos detectar si la voz que escuchamos viene de nuestro Ser o no. Si viene del Ser es un mensaje amoroso de Unidad, sin juicio ni comparación, con el que nos sentiremos más en paz.

Elegir la voz que queremos seguir es nuestra única libertad.

lunes, 25 de mayo de 2020

Volver al estado de paz

No hagas real la obra de teatro que interpretas en este mundo.

No te identifiques con el personaje que representas ya que sufrirás.

No te olvides que has venido para experimentar situaciones y relaciones con el papel del actor o actriz que lleva tu nombre.
 
Antes de nacer preparaste minuciosamente los hitos más importantes de tu vida y acordaste con los que serían tus familiares y amigos el rol que desempeñaría cada uno de ellos.
 
Para volver al estado de paz siente tu naturaleza divina. Eres Hijo de la Fuente y como tal, heredaste sus dones y talentos siendo el Amor tu esencia.

sábado, 18 de abril de 2020

Un nuevo amanecer

Es muy sorprendente lo que está ocurriendo en estos momentos. De la noche a la mañana nos encontramos confinados en casa por la pandemia del coronavirus. Miramos con impotencia como parten personas queridas sin prácticamente poder despedirnos de ellas. Sin tomar su mano y abrazarlas.

En las peores situaciones es cuando más nos unimos como humanidad. Jamás he vivido una ola de solidaridad tan grande. Sentimos la necesidad de hacer algo por los demás que nos nace desde lo más profundo, donde mora el Amor que realmente somos. Se han disparado las solicitudes de voluntariado en las ONGs. Llamamos a familiares y amigos más que nunca. Y a las 8 de la tarde nos unimos en el emocionante aplauso vecinal como agradecimiento y para seguir recordando que juntos lo conseguiremos.

Esta situación nos motiva a replantearnos qué sentido tiene esto… qué estamos haciendo con nuestras vidas… vivimos desde el qué dirán o desde la autenticidad... qué hemos dejado de hacer y nos gustaría hacer a partir de ahora… qué estamos dispuestos a cambiar… cómo nos gustaría vivir el tiempo que nos queda… dónde radica nuestra fortaleza… Es momento de reflexionar, cuestionarnos todas y cada una de nuestras creencias y en consecuencia actuar.

Estamos tomando conciencia que los problemas de los demás, también tienen que ver con nosotros ya que en esencia somos Uno. Componemos las innumerables caras de un gran poliedro que tiene como núcleo el Amor.

Unamos nuestros corazones para dar paso a un nuevo amanecer en el que reine la justicia social, la solidaridad y la paz.

Que nunca olvidemos esta gran lección de la Vida.

viernes, 10 de abril de 2020

La gran lección

Hace un tiempo publiqué este ejercicio de reflexión:
Imagina que te quedan sólo unos pocos días de vida, ¿cuál es la gran lección que has aprendido y quieres compartir?

Fueron muchísimas las respuestas en las Redes Sociales. Estas son algunas de ellas:

Dar importancia a los pequeños detalles que tienen valor y trascendencia.

Que el propósito de esta vida es el servicio hacia los demás.

La vida es mucho más que bienes materiales, son experiencias, por lo que hay que aprenderla a vivir, desaprendiendo todo lo que nos han enseñado desde niños.

Somos libres en elección, decisión y acción. Nos atamos a hilos invisibles y normas impuestas.

Que el amor es lo que puede curar las heridas más profundas.

A ver y a amar la vida desde otra perspectiva.

El amor todo lo puede.

Desde el corazón aprendí a perdonar.

Vivir el presente, valorar lo que recibo, agradecer, aprender en lugar de culparme.

Que solo tenemos el presente, este minuto (…) La vida es ya, este momento y si la vivimos un día a la vez podemos contemplar toda su hermosura!

Que Dios está en mi corazón, que yo soy parte de Él y Él es parte de mí.

Ser consciente de que la muerte no existe, y seguimos en nuestro camino.

Que soy algo más que un cuerpo. Soy parte del Todo.

No podemos cambiar a nadie, solo a nosotros mismos. Al cambiarnos cambia nuestra percepción de la realidad!

Que no hay nada que temer.

Sin importar lo que estés atravesando en tu vida abraza!!!

sábado, 4 de abril de 2020

Amor eterno

Solo te llevarás aquello que anida en tu corazón:
el amor que has dado y recibido.
Amor que te acompañará eternamente

sábado, 28 de marzo de 2020

Sincronicidad

Crees que todo pasa por ti, por tu control. Fíjate que lo mejor y lo peor que te ha pasado, normalmente no lo tenías previsto, al menos a nivel consciente.

Hay una maravillosa sincronicidad, que no casualidad. Todas las piezas encajan. Todo ocurre de manera perfecta en tiempo y forma. Estás donde tienes que estar, en el momento oportuno, para aprender las lecciones que necesitas en tu despertar.

La mejor actitud que puedes tener ante la Vida es confiar y entregar lo mejor de ti mismo en aquello que estés haciendo, sea lo que sea.

Date la oportunidad de disfrutar del presente, el aquí y ahora.

sábado, 21 de marzo de 2020

Morir solo es el final de una etapa en el camino de la vida

Somos ignorantes por nuestra falta de perspectiva. Creemos que nuestra vida comienza con el nacimiento y finaliza con la muerte cuando realmente en esencia nunca nacimos, ni nunca moriremos ya que somos seres espirituales eternos creados desde la Fuente, desde Dios, al extender su infinito Amor.

Una vez que nuestras constantes vitales cesen y se produzca el fallecimiento del cuerpo comprobaremos extrañados como nuestra conciencia sigue viva. Estupefactos veremos nuestro cuerpo desde fuera y sentiremos el llanto de las personas que nos han acompañado hasta el final. Hasta es posible que asistamos a nuestro propio funeral. Y por fin comprobaremos que la muerte como tal no existe, solo existe la creencia en la muerte al seguir viviendo en otra estructura más liviana.

Morir no equivale a “descansar en paz” ya que la muerte nos liberará del dolor físico pero no del sufrimiento mental y miedo que nos acompañará hasta que tomemos conciencia que son solo los pensamientos los que crean “nuestro infierno”.

Al venir a esta tierra escribimos una página más en el diario de nuestra vida, que ya lleva escritas cientos o miles de ellas, y en el que continuaremos escribiendo muchas más.

Cuando llegue ese gran momento del final de nuestra existencia, abordémoslo desde la curiosidad del niño que llega a una nueva ciudad. Soltemos nuestros apegos y preocupaciones ya que donde vamos no las necesitaremos. Demos gracias por la oportunidad de haber nacido y experimentado en esta tierra. Y desde esta confianza, serenamente abrámonos a la entrada en una nueva etapa de nuestra vida.

jueves, 19 de marzo de 2020

Cambiemos el mundo desde nuestro interior

Esta crisis mundial por el coronavirus nos da la oportunidad de hacer un alto en el camino.  El aislamiento es una maravillosa ocasión para mirar hacia adentro y encontrar el sentido de nuestras vidas.

Reflexionemos  si realmente estamos viviendo la vida que queremos vivir o la vida que los demás quieren que vivamos.

Busquemos en nuestro interior el amor que somos y así nuestra luz se extenderá a todo el Universo como un bálsamo de paz que llegará a los temerosos corazones agobiados por el miedo.

Cambiemos el mundo desde nuestro interior.

domingo, 15 de marzo de 2020

Todo lo que necesitamos para ser felices está en nuestro interior

En el fondo, muy en el fondo, prácticamente todos estamos sumidos en el miedo. Miedo a la enfermedad, miedo a envejecer en soledad, miedo a la muerte, miedo a que le pase algo a nuestros hijos y familiares, miedo a perder a nuestra pareja, miedo a la escasez… miedos… miedos… miedos…
 
Es normal que tengamos esta forma de pensar al creer que la solución a nuestros miedos tiene que venir de fuera.
 
Me pregunto, y si en vez de afrontar las situaciones desde el miedo las tomáramos como magníficas oportunidades para experimentar y crecer interiormente.
 
Nos resulta angustioso quedarnos solos y/o aislados ya que nos obliga a mirar hacia dentro.
 
Si tomáramos conciencia que todo lo que necesitamos para ser felices está en nuestro interior y lo único que nos puede hacer sufrir son nuestros propios pensamientos tal vez empezaríamos a ver la vida de otra manera.

domingo, 1 de marzo de 2020

Todo juicio es auto-ataque

Todas nuestras culpas vienen de la culpa original oculta en las profundidades del inconsciente. Se generó hace tantísimo tiempo que es imposible recordarla. Fue el fruto de una decisión: nuestra idea de vivir en un mundo separado de la Fuente, del Amor que somos. Esa errónea y alocada decisión fue el origen de la culpa inconsciente que gobierna nuestras vidas. Aunque lo ignoremos, en cada instante estamos reviviendo esa decisión tomada y la culpa que generó nos corroe interiormente al creer que destruimos el mundo de felicidad y armonía del que gozábamos junto a la Fuente.

Fue justo en ese instante cuando decidimos implantar “un guardián de la separación”, el ego, al que le dimos una instrucción muy concreta: “tú serás el que nos mantendrá alejado de la Fuente”. Para ello fabricamos un universo (Big Bang) en el que tener una identidad individual y escondernos de la Fuente.

Dado que la culpa nos hace sentir fatal, utilizamos el mecanismo psicológico de la proyección para intentar librarnos de ella. La proyectamos fuera en el mundo en forma de ataque o juicio a los demás aprovechando cualquier situación o relación. Ingenuamente creemos que así nos liberaremos de ella. Nada más lejos de la realidad. Al atacar al otro, inconscientemente sabemos que estamos atacando a un inocente, ya que el origen de nuestra ira es nuestra propia culpa proyectada sobre el otro, con lo que sentiremos más culpa y además nos entrará miedo por su posible respuesta de contraataque. Como la culpa es el “combustible” del ego, al aumentar nuestro nivel de culpa el ego saldrá fortalecido y así mantendrá activa la separación de la Fuente vida tras vida en un ciclo de sufrimiento y muerte sin aparente fin. Una horrible pesadilla.

Una de las formas más eficaces de salir del sufrimiento es aminorar el nivel de culpa inconsciente a través de la práctica del verdadero perdón. Consiste en comprender que todo ataque o juicio es auto-ataque y además se solicita ayuda a la Fuente para poder ver la situación de otra manera, desde los ojos del Amor. Da como resultado la eliminación de ese fragmento de culpa, reducción del ego, menor reactividad y mayor paz interior.

El mundo es el entorno ideal para practicar nuestras lecciones de verdadero perdón. Ahora ya sabemos que cada ataque, juicio, crítica contra otro, o contra nosotros mismos, viene del ego y podemos utilizarlo, si así lo decidimos, como una oportunidad para aminorar la culpa y estar un paso más cerca de nuestra liberación. Qué buena noticia!!!

Y llegará el día del “juicio final” en el que haremos “el último juicio” y al practicar el verdadero perdón disolveremos la última brizna de culpa que quedaba en nuestro inconsciente. En ese momento, desaparecerá el ego y alrededor nuestro solo veremos Amor, o peticiones de Amor, en todos los seres. Será el estado de iluminación, el final del sueño de sufrimiento y muerte.

Mucho ánimo, sólo es una decisión.