viernes, 23 de diciembre de 2011

Amistad contra la soledad

Hace un año os comunicaba el proyecto de obra social que iniciaba. Hoy quiero compartir con vosotros la inmensa alegría que tengo ya que la Fundación AGM, Amics de la Gent Major que dirijo, ha logrado acompañar afectivamente en el 2011 a más de 100 mayores que sufren soledad y exclusión social.

Estoy profundamente agradecido por la colaboración de nuestros más de 80 voluntarios que altruistamente les dan amor incondicional. Sin ellos este proyecto social sería imposible ya que nuestro crecimiento es enorme. Para mi, impulsar Amics de la Gent Major es una misión en esta vida que acepto con responsabilidad y mucha ilusión.

La felicitación de Navidad corresponde a la foto que le hice a nuestra voluntaria de 17 años que le daba la mano a su amiga mayor de 103 años.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Cómo prepararse para el 2012

Os adjunto fragmentos de la reflexión publicada por Enriqueta Olivari en su blog shantidasi.wordpress.com

La verdad es que nadie sabe exactamente qué sucederá en el año 2012. Sabemos que es el final de una época y el comienzo de otra, y que el mundo no se acabará, ni nada parecido.

Este cambio de era nos está trayendo a todos una oportunidad única de evolucionar y transformarnos. Y en la medida que nos acercamos al próximo año, la aceleración se intensifica, y la sensación de urgencia en el aire irá en aumento.

Quizás ahora nos sintamos más ansiosos, y tal vez nos surjan preguntas que nunca antes nos habíamos hecho. Pero en lo profundo de nuestro ser sabemos que muchos cambios son necesarios dentro nuestro y en la sociedad, para poder crear entre todos el mundo de Luz que queremos habitar.
Y cada uno debe comprender que la propia transformación espiritual es vital.

Para prepararse para el 2012, aquí comparto algunas sugerencias:

Hacerse amigo del cambio

Comprender que los momentos de mayor crecimiento se producen en los momentos de cambios. Meditar todos los días, así como aprender a desapegarse y a relajarse con respecto a los cambios que la vida nos pide que realicemos.

Actualizar las relaciones
Es importante evaluarlas con regularidad durante el año que viene. Es a través de las relaciones donde tenemos la mayor oportunidad de crecer y vernos a nosotros mismos, ya que los demás son apenas nuestro espejo.
Considerar cómo podemos mejorar nuestras comunicaciones, incluyendo las palabras que decimos y los sentimientos que expresan. Cuán conscientemente nos comuniquemos con los demás va a determinar la calidad de las relaciones.
Y respetar el propio espacio y el de los demás es un ingrediente clave en una relación exitosa.
Para capear los altibajos de estos tiempos, vamos a necesitar más tiempo a solas, para meditar y relajarnos.
Explorar regularmente la dinámica de nuestras relaciones, para que la intuición nos muestre los ajustes necesarios.
Esforzarnos por ser tan honestos como podamos, siempre, con nosotros mismos y con todo el mundo.

Calmar la mente y el cuerpo
Meditar y cambiar la perspectiva, evitando la preocupación de la mente.
Tener poder sobre la mente y las emociones se convertirá en una habilidad esencial en el 2012 y más allá.
Esa es la verdadera llave, la que nos abrirá la puerta hacia una mayor expansión y crecimiento.

Sentir y vibrar Amor
En lugar de miedo, debemos anclarnos en el Amor la mayor parte del tiempo.
Esa es la verdadera llave, la que nos abrirá la puerta hacia una mayor expansión y crecimiento.

lunes, 14 de noviembre de 2011

El cambio nos asusta


Comparto con vosotros fragmentos del libro Lecciones de vida de Elisabeth Kübler-Ross y David Kessler.

“El nacimiento parece ser el comienzo y la muerte el final, pero no lo son: sólo son puntos en un continuo“

“Todos experimentamos el tiempo de diferente manera porque el valor del tiempo depende de la percepción individual”

“El cambio nos asusta porque quizá no seamos capaces de controlarlo. Preferimos los cambios que hemos decidido hacer, ya que les encontramos sentido. Pero los cambios que nos sobrevienen nos resultan incómodos, nos hacen sentir como si la vida fuese en la dirección equivocada. Pero, nos guste o no, el cambio ocurre y, como la mayoría de las cosas en la vida, no es que nos ocurra a nosotros: simplemente ocurre”

“El cambio supone despedirse de una vieja situación conocida y enfrentarse a una situación nueva, desconocida. A veces no es lo viejo o lo nuevo lo que nos acobarda: es el tiempo que transcurre entre ambos”

“Ronnie Kaye, autora de Spinning Straw into Gold y dos veces superviviente de cáncer de mama, dice: “En la vida, siempre que una puerta se cierra, otra se abre... pero los pasillos son un tormento

“En la cultura occidental no le concedemos valor a la edad. No consideramos las arrugas como parte de la vida; son algo que hay que evitar, ocultar, eliminar. Sin embargo, por mucho que echemos de menos la energía y el vigor de la juventud, muchos no querríamos volver sobre los mismos pasos porque también recordamos intensamente la confusión de aquellos años”

Envejecer con gracia es experimentar plenamente cada día y cada estación. Cuando hemos vivido realmente nuestra vida, no queremos vivirla de nuevo. Es la vida que no hemos vivido la que lamentamos”

“Solemos despertarnos por la mañana y ducharnos para quitarnos el polvo del día anterior, pero seguimos llevando encima la carga emocional del ayer. No tiene por qué ser así. Podemos renovarnos cada día y partir de cero, podemos saludar el día frescos y limpios: basta con que centremos nuestra conciencia en el presente, que veamos la vida como realmente es”

“Cuando no vivimos en el momento, no nos vemos realmente unos a otros ni a nosotros mismos. Y, si no vivimos en el momento, no podemos encontrar la felicidad. No se trata de cerrar la puerta al pasado, sino de verlo como lo que fue y seguir adelante.”

“Por difícil que resulte aceptarlo, la realidad es que no morimos antes de tiempo. Cuando morimos, ésa es nuestra hora”

Nuestro desafío es experimentar plenamente el momento presente. Y es un gran desafío: saber que el instante presente contiene todas las posibilidades de felicidad y amor, y no desperdiciar estas posibilidades por esperar un futuro determinado”

domingo, 23 de octubre de 2011

Evolucionar significa aprender a amar


Comparto con vosotros fragmentos del libro Las leyes espirituales de Vicent Guillem Primo.

Muchas veces me siento vacío, solo e incomprendido ¿Por qué me pasa esto?
Es normal y a mucha gente le pasa. Es porque vivís en un mundo con mucha falta de amor, estando unos de espaldas a otros.
Y es cierto que uno puede estar solo en el mundo, aunque tenga mucha gente a su alrededor, porque el sentimiento de soledad parte de no sentirse amado, de no sentirse comprendido. La mayoría de gente de vuestro mundo se ha acostumbrado a vivir así, sin sentir, en soledad interior, en ausencia de amor verdadero. Creéis que estáis solos porque todavía no habéis tomado conciencia de que todos vosotros sois hermanos, que compartís un mismo destino y que os necesitáis los unos a los otros para poder alcanzarlo.”
 
¿Y cúal es ese destino común que tenemos que alcanzar?
La felicidad verdadera, que sólo es posible alcanzar a través de la evolución en el amor. El amor es lo único que puede llenar el vacío del interior.”
 
La pregunta fundamental, que me atormenta constantemente es ¿por qué existo y para qué? ¿Para qué he nacido? ¿He venido a hacer algo? Porque no sé lo que he venido a hacer.
Has venido a evolucionar.”

¿Qué quieres decir con evolucionar? ¿Evolucionar en qué?
Al proceso de transformación del egoísmo en amor es a lo que llamo evolución. Evolucionar significa aprender a amar.”

¿Por qué el sufrimiento? ¿Por qué vivimos en un mundo que tiene tantas contradicciones, desde lo más bello hasta lo más atroz y destructivo? El odio, las guerras, el hambre, la miseria, el sufrimiento. No puedo entender qué sentido tiene todo esto. ¿Tiene algún sentido, o se lo busco pero no lo tiene?
Sí tiene un sentido, evolucionar. Todas esas calamidades de las que hablas tienen un mismo origen, la ausencia de amor, llamémosla egoísmo. Igual que la suma del egoísmo de cada persona puede hacer del mundo un auténtico infierno, como ocurre en la actualidad, cuando ese egoísmo se transforme en amor, la suma del amor de cada persona transformará el mundo en un paraíso. En vuestra voluntad está el transformaros interiormente desde el egoísmo al amor, y si lográis el cambio interior, entonces el exterior, lo que os rodea, el mundo entero, cambiará como lógica consecuencia de ello. El mundo físico en el que estáis está ahí para ayudaros a experimentar en ese proceso de transformación. Es como la arcilla para el niño que quiere aprender a modelar.”

Sigo sin entenderlo ¿Evolución para qué, hacia dónde? ¿Qué sentido tiene todo ese esfuerzo si, al fin y al cabo, todo eso se va a terminar con la muerte?
La evolución de cada ser hacia una mayor capacidad de amar, de sentir y de saber, hacia mayores cotas de felicidad, no termina nunca, de lo contrario, no tendría sentido.”

¿Qué quieres decir con esto?
Que el ser nunca deja de existir, es decir, es inmortal.”

¿Cómo puedes decir eso si cada día vemos como mueren miles, millones de seres humanos?
Lo que muere es sólo el vehículo que utiliza el ser para manifestarse en el plano físico, es decir, su cuerpo físico. Su esencia, su conciencia, continúa existiendo.”

¿Quieres decir con esto que existe la vida después de la muerte?
Sí. En realidad lo que quiero decir es que la muerte no existe, y que lo que se descompone es sólo el vehículo que utiliza el espíritu para manifestarse en el plano físico.”

sábado, 17 de septiembre de 2011

Yo merezco


Comparto con vosotros una reflexión publicada por Enriqueta Olivari en el blog de su web www.sanatualma.com

Siempre se le da énfasis al dar, pero también es importante saber recibir. Sin esta capacidad, el círculo del Amor quedaría incompleto, pues dar y recibir son las dos caras de una misma moneda.

Si alguien nos hace un favor o nos da un regalo valioso, podemos caer en el miedo a sentirnos en deuda. Entonces en lugar de recibir de corazón abierto, acabamos sintiéndonos incómodos y preocupados por poder retribuirle.

Pero en muchas ocasiones lo único que se nos pide es recibir, y al hacerlo ya estamos dando: le estamos dando al otro la oportunidad de hacer algo por nosotros.

Pedir es otro aspecto de la capacidad de recibir. Decir de un modo directo y claro lo que queremos o necesitamos es estar dispuesto a recibir del otro, de la vida o del universo. Pero en lugar de pedir sin dudas y temores, en muchas ocasiones nos quejamos de la falta de ayuda y apoyo. Sin embargo, los demás no pueden ni deben adivinar lo que necesitamos; es nuestra responsabilidad comunicarlo.

Detrás de la incapacidad de recibir puede estar escondida la falta de merecimiento: en lo más hondo sentimos que no merecemos ser tenidos en cuenta, no merecemos ocupar el lugar que nos corresponde, y que es sólo dando que recibiremos atención y afecto.

Para sentirse merecedor es importante amarse a uno mismo, incondicionalmente. Y es esencial comprender que no merecemos recibir por lo que damos o hacemos. En realidad todos nos merecemos lo mejor de la vida por lo que somos: seres de pura luz, Amor y bondad, aún cuando nos cueste reconocerlo.

Para sanar este patrón puedes mirarte a los ojos en el espejo y con Amor y convicción afirmar en voz alta: “Yo merezco”. Verás qué íntegro te sientes. Pero si no te lo crees, o te sientes triste y te dan ganas de llorar, hazlo. Expresa esa emoción, y mientras lo hagas quizás te vengan recuerdos de aquellas situaciones en las cuales te inculcaron que no mereces. Pueden ser episodios de tu infancia, o más recientes… Es igual, al liberar la emoción y la creencia, te estás sanando a ti mismo.

Otra práctica importante es que te atrevas a pedir. Comienza con las personas con las cuales sientes confianza. Pídeles ayuda en tus tareas diarias, pide consejo a algún amigo, pide lo que sea que necesites, y hazlo sin miedo ni culpa. Te sorprenderás al ver cuánta gente está dispuesta a darte, si lo permites.

Tú eres valioso e importante, tú ocupas un lugar irremplazable en el universo. De no ser así, no estarías aquí, en este mundo, y no estarías leyendo este texto…

lunes, 5 de septiembre de 2011

Un mensaje de amor y esperanza para la humanidad


Vicent Guillem Primo es Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad de Valencia (España). Trabaja actualmente en el Servicio de Hematología y Oncología del Hospital Clínico Universitario de Valencia como investigador en la determinación de la predisposición genética al cáncer.

Vicent publicó en 2008 el libro Las leyes espirituales en el que responde a más de 600 cuestiones relacionadas con el mundo espiritual y el sentido de la vida.

Aquí tenéis algunos fragmentos del libro:


"¿Cómo puede ser que podamos ser capaces de amar y de ser egoístas al mismo tiempo? ¿No me podrías aclarar este punto?
Sí, claro. Imagina que el ser humano es como una cebolla, en cuyo corazón está el espíritu que desprende la luz, que es el amor. Este centro emisor de luz se encuentra recubierto por múltiples capas, de manera que cada una de estas capas obstruye el paso de la luz un poco, hasta que la suma de todas las capas juntas impide casi totalmente que la luz salga al exterior. Cada una de esas capas representa una manifestación del egoísmo que hay que ir eliminando progresivamente, para que finalmente la luz, el amor, brille, se exprese en toda su magnitud. A medida que vamos eliminado capas, la luz (el amor) del interior encuentra menos obstáculos para salir al exterior. Las capas más externas corresponden al egoísmo más primitivo y superficial. Son las capas correspondientes a la vanidad. Las capas intermedias corresponderían al orgullo y las más internas a la soberbia."

"Antes has dicho que no hay que sobreesforzarse en complacer a los demás. Esto parece una contradicción porque ¿acaso cuando quieres a una persona no intentas complacerla en todo para que se sienta feliz?
Es un gran error creer que a una persona se la quiere más cuanto más se la complace, y es la gran trampa en la que cae mucha gente bienintencionada. A una persona a la que se quiere hay que intentar ayudarla, comprenderla y respetarla, antes que complacerla. Es importante saber la diferencia entre complacer y ayudar, porque puede ocurrir que cuando complaces a alguien, en vez de ayudarle, le estés perjudicando, si lo que complaces es su egoísmo. Y te perjudicas a ti mismo si cuando complaces sometes tu voluntad al egoísmo de otra persona, perdiendo tu libertad."

"¿Y cómo distinguir entre ayudar y complacer?
Cuando una persona se carga sobre las espaldas las pruebas o circunstancias que le corresponde superar a otra, se le complace y no se le ayuda, ya que impides que se ponga a prueba en sus capacidades, contribuyendo a su estancamiento espiritual. La auténtica ayuda consistiría en apoyar y alentar a la persona para que resuelva ella misma sus pruebas o circunstancias, y así pueda avanzar."

Según Vicent:
"Mi esperanza es que te sirva a ti tanto como a mí me ha servido. Te sirva para conocerte a ti mismo, para despertar tus sentimientos, para liberarte de tu parte egoísta, para comprender el motivo de tu vida, de las cosas que te han ocurrido y te ocurren. Para que tengas esperanza, para que comprendas mejor a los demás y llegues algún día a quererlos, para que entiendas el mundo en el que vives, para que puedas sacar hasta de la mayor desgracia el mayor provecho para tu evolución en el amor. En definitiva, para que seas tú mismo, libre, consciente para experimentar el amor auténtico, el amor incondicional y que seas, por tanto, más feliz."

El libro completo lo puedes descargar gratuitamente en formato electrónico de su blog las leyes espirituales o adquirirlo en papel por un importe simbólico en las tiendas que se indican.

martes, 23 de agosto de 2011

Matricúlate en la vida


Comparto con vosotros un texto publicado por Emma García en su blog coachemmagarcia.wordpress.com

Las asignaturas pendientes

Curso tras curso vamos dejando asignaturas pendientes. Cosas que siempre quedan por hacer porque no le dedicamos el suficiente tiempo y esfuerzo.

Sin embargo, en verano nos volcamos en esas materias que dejamos aparcadas durante el curso, con el fin de empezar el siguiente sin nada colgando. Por eso, en el fondo las vacaciones llegan a ser estresantes, porque intentamos hacer todo lo que no hicimos durante once meses.

El mes de julio o agosto es para pasar tiempo con la familia, con los amigos, para descansar, divertirse, hacer ejercicio, hacer limpieza, reformas, ordenar los armarios, leer, dedicarle al hobby, visitar lugares idílicos, cocinar, reconquistar a la pareja…

Todas esas cosas importantes pasan a un segundo plano irremediablemente de septiembre a junio, para en el siguiente verano compensar nuevamente el tiempo pendiente con la dedicación adecuada. Así, nos hemos especializado en recuperar esas asignaturas pendientes con un poco de dedicación estival.

Y ahora que empieza el nuevo curso ¿piensas hacer lo mismo? ¿Hasta cuándo crees que puedes continuar así?

Claro que ya sé lo que vas a decir: “que no hay tiempo suficiente para ello”, “que es necesario que invierta todo mi tiempo en el trabajo para mantener a mi familia”, “que no tengo elección”… Si sientes que no hay salida ¿cuándo vas a hacer algo por cambiar la situación?
 
Haz una lista de todas las asignaturas que quieres aprobar en tu vida, y piensa en cuáles te conformas con un suficiente y en cuáles quieres destacar. Ahora que empieza el nuevo curso es hora de matricularte en aquellas que te hagan llegar a tu objetivo final, que te ayuden a cumplir tu propósito en la vida.

Decide si el trabajo que tienes es un medio para lograr lo que quieres, o es un impedimento para realizarte como persona.

Si te importa tu familia, plantéate qué hacer para disfrutar de ella.

Si necesitas más tiempo para ti, busca la forma de conseguirlo.

Encuentra la coherencia en tu vida y se fiel a tus sueños. Lucha por lo que quieres llegar a ser, hacer y tener. Matricúlate en la vida.

El sistema en que vivimos no cumple el programa para ello, está demostrado que no es válido como medio para la prosperidad.

Solo tú como persona libre eres capaz de proporcionarte todo lo que necesitas. 

Solo tienes que recuperar el control sobre tu vida, tomar el poder que te has dejado arrebatar sin darte cuenta. Emprende el camino para alcanzar el éxito, la vida te lo estará mostrando.

Solo si abres tu corazón podrás ver las oportunidades que ante ti se presentan.

Mira a tu alrededor y escucha, de alguna forma te llegarán las señales que buscas. ¿Estás atent@?

sábado, 16 de julio de 2011

Cerrando puertas


Comparto con vosotros un mensaje de tendenciavital.ning.com basado en una reflexión de Paulo Coelho.

Hay que saber cuándo una etapa llega a su fin. Cuando insistimos en alargarla más de lo necesario, perdemos la alegría y el sentido de las otras etapas que tenemos que vivir.

Poner fin a un ciclo, cerrar puertas, concluir capítulos... no importa el nombre que le demos, lo importante es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya terminaron. ¿Me han despedido del trabajo? ¿Ha terminado una relación? ¿Me he ido de casa de mis padres? ¿Me he ido a vivir a otro país? Esa amistad que tanto tiempo cultivé, ¿ha desaparecido sin más? Puedes pasar mucho tiempo preguntándote por qué ha sucedido algo así. Puedes decirte a ti mismo que no darás un paso más hasta entender por qué motivo esas cosas que eran tan importantes en tu vida se convirtieron de repente en polvo.

Pero una actitud así supondrá un desgaste inmenso para todos: tu país, tu cónyuge, tus amigos, tus hijos, tu hermano; todos ellos estarán cerrando ciclos, pasando página, mirando hacia delante, y todos sufrirán al verte paralizado.

RECUERDOS
Nadie puede estar al mismo tiempo en el presente y en el pasado, ni siquiera al intentar entender lo sucedido. El pasado no volverá: no podemos ser eternamente niños, adolescentes tardíos, hijos con sentimientos de culpa o de rencor hacia sus padres, amantes que reviven día y noche su relación con una persona que se fue para no volver. No podemos ser empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros. ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Todo pasa, y lo mejor que podemos hacer es no volver a ello. Por eso es tan importante (¡por muy doloroso que sea!) destruir recuerdos, cambiar de casa, donar cosas a los orfanatos, vender o dar nuestros libros.

Todo en este mundo visible es una manifestación del mundo invisible, de lo que sucede en nuestro corazón. Deshacerse de ciertos recuerdos significa también dejar libre un espacio para que otras cosas ocupen su lugar. Dejar para siempre. Soltar. Desprenderse. Nadie en esta vida juega con cartas marcadas. Por ello, unas veces ganamos y otras, perdemos. No esperes que te devuelvan lo que has dado, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor.

Deja de encender tu televisión emocional y ver siempre el mismo programa, en el que se muestra cómo has sufrido con determinada pérdida: eso no hace sino envenenarte. Nada hay más peligroso que las rupturas amorosas que no aceptamos, las promesas de empleo que no tienen fecha de inicio, las decisiones siempre pospuestas en espera del "momento ideal".

La vida está para adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando puertas abiertas "por si acaso", nunca podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con satisfacción. ¿Noviazgos o amistades que no clausuran?, ¿Posibilidades de regresar? (¿a qué?), ¿Necesidad de aclaraciones?, ¿Palabras que no se dijeron?, ¿Silencios que lo invadieron? Si puedes enfrentarlos ya y ahora, hazlo, si no, déjalos ir, cierra capítulos. Dite a ti mismo que no, que no vuelven. Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio.

Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año. Por lo tanto, no hay nada a qué volver. Cierra la puerta, da vuelta a la hoja, cierra el círculo. Ni tú serás el mismo, ni el entorno al que regresas será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático. Es salud mental, amor por ti mismo, desprender lo que ya no está en tu vida.

DEJARLO IR
Antes de comenzar un nuevo capítulo hay que terminar el anterior: repítete a ti mismo que lo pasado no volverá jamás. Recuerda que hubo una época en que podías vivir sin aquello, sin aquella persona, que no hay nada insustituible, que un hábito no es una necesidad.

Puede parecer obvio, puede que sea difícil, pero es muy importante. Cerrar ciclos. No por orgullo, ni por incapacidad, ni por soberbia, sino porque, sencillamente, aquello ya no encaja en tu vida. Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo.

Deja de ser quien eras, y transfórmate en el que eres...Esa es la vida...

sábado, 11 de junio de 2011

Una cosa es vivir solo, y otra, sentirse solo


Comparto con vosotros un reportaje publicado en el diario El País.

Lo dedico en especial a los que están viviendo solos y a aquellos que por distintos motivos les ha tocado vivir alguna etapa de su vida en solitario.

Me quedo con las frases:

... Una cosa es vivir solo, y otra, sentirse solo...

...La soledad buscada es un bien para el alma…

…El aislamiento es una noción física, la soledad es una experiencia emocional…

…Estar a solas, ese encuentro con nosotros mismos es una conveniencia más que un inconveniente…

…El instinto social de los humanos no se basa en el amor a la sociedad, sino en el miedo a la soledad…

…Nacer y morir son un ejercicio solitario al que nos pueden acompañar pero no resolver por nosotros. Somos principio y fin. Todo nace y acaba muriendo en nosotros mismos, o sea, en nuestra soledad interior…

…Nunca estamos solos. Nos rodea la vida…

…Nos sentimos solos cuando creemos que no deberíamos estarlo…

Al final, lo importante no es dónde, cuándo ni cómo, sino que no falte la capacidad de amar y ser amados. Lo contrario nos zambulle en la peor de las soledades

domingo, 22 de mayo de 2011

Mis primeros 50 años



El 26 de mayo de 2011 cumplo mis primeros 50 años.

Tengo el placer de compartir con vosotros una poesía del Premio Nobel de Literatura José Saramago.

¿Cuántos años tengo?


Frecuentemente me preguntan que cuántos años tengo.
¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento!
La edad en que puedo:
Gritar sin miedo lo que pienso,
y hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido...
Tengo la experiencia de los años vividos
y la fuerza de la convicción de mis deseos.

¡Qué importa cuántos años tengo!
¡No quiero pensar en ello!
Unos dicen que ya soy viejo,
y otros que estoy en el apogeo.
Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice,
sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.

Tengo los años necesarios
para gritar lo que pienso,
para hacer lo que quiero,
para reconocer yerros viejos,
y rectificar caminos y atesorar éxitos.

Ahora no tienen por qué decir:
¡Estás muy joven, no lo lograrás!
¡Estas muy viejo, ya no podrás!
Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma,
pero con el interés de seguir creciendo.

Tengo los años en que los sueños,
se empiezan a acariciar con los dedos,
y las ilusiones se convierten en esperanza.

Tengo los años en que el amor
a veces es una loca llamarada,
ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada.
Y otras es un remanso de paz, como el atardecer en la playa.

¿Qué cuantos años tengo?
No necesito con un número marcar,
pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos,
las lágrimas que por el camino derramé
al ver mis ilusiones truncadas,
¡Valen mucho más que eso!

¡Qué importa si cumplo veinte, cuarenta, o sesenta!
Pues lo que importa:
¡Es la edad que siento!

Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida
y la fuerza de mis anhelos.

¿Qué cuantos años tengo?
¡Eso a quien le importa!
Tengo los años necesarios para perder el miedo
y hacer lo que quiero y siento.

sábado, 30 de abril de 2011

Si yo cambiase


Comparto con vosotros una reflexión de Ivette Villeda publicada en www.vidapositiva.com

Si yo cambiara mi manera de pensar hacia los otros... los comprendería.

Si yo encontrara lo positivo en todos... ¡con qué alegría me comunicaría con ellos!

Si yo cambiara mi manera de actuar ante los demás... los haría felices.

Si yo aceptara a todos como son... sufriría menos.

Si yo deseara siempre el bienestar de los demás... sería feliz.

Si yo criticara menos y amara más... cuántos amigos ganaría.

Si yo comprendiera plenamente mis errores y defectos y tratara de cambiarlos... ¡cuánto mejoraría mi hogar y mis ambientes!

Si yo cambiara el tener más por el ser más... sería mejor persona.

Si yo cambiara de ser Yo, a ser Nosotros... comenzaría la civilización del Amor.

Si yo cambiara los ídolos: poder, dinero, sexo, ambición, egoísmo y vanidad definitivamente por: Libertad, Bondad, Verdad, Justicia, Compasión, Belleza y Amor... comenzaría a vivir la verdadera felicidad.

Si yo cambiara el querer dominar a los demás por el autodominio... aprendería a amar en libertad.

Si yo dejara de mirar lo que hacen los demás...tendría más tiempo para hacer más cosas.

Si yo cambiara el fijarme cuánto dan los otros para ver cuánto más puedo dar yo... erradicaría de mí la avaricia y conocería la abundancia.

Si yo cambiara el creer que sé todo... me daría la posibilidad de aprender más.

Si yo cambiara el identificarme con mis posesiones como títulos, dinero, status, posición familiar... me daría cuenta de que lo más importante de mí es que Yo Soy un Ser de Amor.

Si yo cambiara todos mis miedos por Amor... sería definitivamente libre.

Si yo cambiara el competir con los otros por el competir conmigo mismo... sería cada vez mejor.

Si yo dejara de envidiar lo ajeno... usaría todas mis energías para lograr lo mío.

Si yo cambiara el querer colgarme de lo que hacen otros por el desarrollar mi propia creatividad... haría cosas maravillosas.

Si yo cambiara el esperar cosas de los demás... no esperaría nada y recibiría como regalo todo lo que me dan.

Si yo amara el mundo... lo cambiaría.

Si yo cambiara... cambiaría el mundo!

viernes, 15 de abril de 2011

No voy a discutir, no voy a convencer, no voy a aclarar

A esta altura de mi vida en la que estoy a punto de cumplir medio siglo quiero compartir con vosotros mi forma de pensar:

No voy a discutir.
Respeto las ideas del otro y no voy a imponer las mías.

No voy a convencer.
Prefiero actuar con claridad de conciencia y que mis actos reflejen mi vida interior.

No voy a aclarar.
Para el que me conoce de verdad, no es necesario justificar mis actos ya que comprende porqué lo hago. Para el que no me conoce, por más que le diga estaré condenado de antemano por sus prejuicios hacia mí.

Según el libro Lecciones de vida de Elisabeth Kübler-Ross y David Kessler:

“Nuestra felicidad no depende de que las relaciones cambien a mejor. La verdad es que no podemos cambiar a los demás, ni debemos.”

“Recuerda que de lo que se trata no es de decir al otro que está en un error y tiene que cambiar. Tampoco se trata de hacer mejor a la otra persona: siempre se trata de uno mismo. Cada uno crea su propio destino. Cada uno debe ver que lecciones hay en los problemas que le surgen.”

“Al concentrarnos en el otro nos olvidamos del verdadero trabajo que nos corresponde en la relación: nosotros mismos. No debemos vaciarnos de nosotros mismos por llenarnos del otro. La única persona que controlamos es la nuestra. Si trabajamos en nosotros, las circunstancias que vemos cambiarán por sí solas.”

domingo, 3 de abril de 2011

Vivir la alegría

Comparto con vosotros un texto de J.Maurus publicado en artenara.wordpress.com

Vivir la alegría es vivir cada segundo que pasa.

Es corresponder con cada suspiro de corazón a todo lo que habita a tu alrededor; es penetrar en el interior y escuchar el desmayo débil de un alma silenciosa o el lloriqueo de un corazón herido.

Vivir en alegría es reconocer que la Vida no es una carrera y que el futuro es tan distante como el pasado.

Es permitir que cada momento sea un descubrimiento, un acto de gracia y belleza.

Vivir en alegría es descubrir el mundo por primera vez cada mañana.
 
Es maravillarse y aspirar.

Es recibir por igual el triunfo y el fracaso, la humildad y la pureza.

Entonces, podremos ser derrotados, pero no destruidos.

domingo, 20 de marzo de 2011

Escucha a tu corazón


Comparto con vosotros un texto publicado en el blog deldoloralafelicidad.blogspot.com

Hoy una frase de Blaise Pascal:

"El corazón tiene razones que la razón ignora".

Si escucháramos más veces a nuestro corazón, nuestra vida sería mucho más agradable, ya que él tiene razones que la mente nunca comprenderá. Él sabe distinguir entre el bien y el mal, lo bueno y lo malo, lo justo y lo inapropiado...

Nunca se equivoca porque está unido a nuestra alma, que le va guiando para encontrar la senda que nos llevará a encontrar la verdadera felicidad.

Muchas veces lo que hacemos es callar a nuestro corazón, poniéndole muchas capas, como si se tratara de una cebolla. Así pensamos que nuestra vida será mejor, ya que sólo escuchamos a la mente.

Y lo que no somos capaces de comprender, es que lo único que conseguimos actuando de esa manera, es que nos convirtamos en seres sin sentimientos que sólo obran de manera racional, sometidos a una mente que puede llegar a ser muy traicionera por conseguir su propio beneficio.

Eso nunca nos ocurriría con el corazón, ya que él sólo mira por nosotros y sólo desea que seamos felices, viviendo una vida plena y llena de amor.

Lo que debemos hacer para volver a escuchar al corazón, es ir eliminando esas capas que hemos ido colocando en él a lo largo de los años, y dejar que salgan sus bellas razones, esas que la mente siempre ignorará porque nunca será capaz de sentir verdadera felicidad y lo que es realmente amar.

Recordemos siempre, si queremos ser felices, que el corazón tienes razones que la razón ignora.

sábado, 5 de marzo de 2011

Aceptación


Comparto con vosotros un texto de Regina Hill publicado en artenara.wordpress.com

Aceptación significa que puedes encontrar en tu corazón la serenidad que te libere del pasado con sus errores y pesares, te transporte hacia el futuro con una perspectiva nueva, y te haga apreciar la oportunidad de una nueva vida.

Aceptación significa que cuando haya momentos difíciles en tu vida, sabrás hallar el amparo y el consuelo para aliviar tus pesares. Hallarás nuevas aspiraciones y esperanzas, e indulgencia en tu corazón.

Aceptación no significa perfección para siempre. Solo significa que te sobrepondrás a la imperfección.

Aceptación es la senda hacia la paz, para liberarte de lo peor. Conservar lo mejor, y hallar en tu alma la esperanza que te acompañe toda la vida.

Aceptación es la mejor defensa del corazón, el mayor bien del amor, y la manera más fácil de seguir creyendo en ti y en los demás.

domingo, 20 de febrero de 2011

Déjate llevar, fluye desde tu alma


Comparto con vosotros mi reflexión del impresionante video de una persona que ha encontrado sentido a su gravísima enfermedad. El video está al final del texto.

Cuando eres capaz de mirarte con cierta perspectiva, te das cuenta que en esta vida todo es temporal. Nuestros padres, hermanos, hijos y amigos nos acompañan en las etapas. No podemos asegurar nada ni a nadie ya que son tramos de nuestro camino. Cuando pasamos página de una fase surgen nuevas amistades que nos acompañarán y guiarán para seguir adelante.

Para despertar y tomar conciencia de nuestra situación, la Vida nos hace pasar por las ruedas de moler. De ellas podemos salir pulidos o destrozados. Cuando la superemos nos vendrá otra rueda más difícil que nos ayudará a crecer. Son pruebas que nos obligan a iniciar una reflexión desde el fondo de nuestro corazón para encontrar el sentido de nuestra vida. Por desgracia esta es la única manera. Necesitamos un buen “palo” que nos obligue a detenernos, pensar y valorar lo que realmente importa.

A este mundo venimos, entre otras cosas, a crecer interiormente. Y lo conseguimos gracias a las lecciones que tenemos la oportunidad de vivir. Las hay muy felices, que suelen ser las menos. Pero las que realmente nos hacen crecer son aquellas que nos hacen sufrir para salir fortalecidos de la experiencia siempre que la orientemos desde el amor, son los regalos de los que habla el video.
 

No importa los años que vivamos, sino como los hemos vivido. Al final de nuestra vida, cuando crucemos ese umbral que nos impone tanto respeto, la Luz sólo nos hará una pregunta: ¿Qué has hecho por los demás en tu vida?
 

No esperemos al final de nuestros días. No esperemos al próximo “palo” que nos dará la Vida. Reflexionemos ya desde el fondo de nuestro corazón y pensemos si nuestra actitud ante la Vida es de luz, haciendo el bien a los que nos rodean. O de oscuridad, si de manera egoísta todo lo orientamos buscando únicamente nuestro beneficio personal.

De este mundo, sólo nos llevaremos el amor que hemos sido capaces de dar y recibir. Amor que nos acompañará para siempre por nuestro camino hacia la Luz.

Nuestra estancia aqui se limita a unos pocos años. Cada vez que vemos salir el sol es una nueva oportunidad de crecer. Vivamos el presente con claridad de conciencia, el aquí, el ahora. Hagamos aquello que queremos hacer y no lo que creemos que debemos hacer. Sepamos disfrutar de esas pequeñas alegrías que nos ofrece la vida cada día.

Déjate llevar, fluye desde tu alma.


jueves, 3 de febrero de 2011

Diferencia entre querer y amar


Comparto con vosotros un texto de Reiki Lanzarote publicado en el blog artenara.wordpress.com
 
Todos los vicios de la mente son fruto de interpretar de forma egocéntrica la realidad, una actitud impulsiva e inconsciente que nos impide aceptar lo que sucede tal como viene y a los demás tal como son.

Ésta es la causa real de todo nuestro sufrimiento, que además nos encierra en un círculo vicioso muy peligroso. Para poder amar, primero hemos de albergar amor en nuestro corazón.

En este caso, el problema es en sí mismo la solución. Y lo primero que debemos saber es qué es el amor.
No al que estamos tan acostumbrados, sino al de verdad. Porque una cosa es querer, y otra muy distinta, amar.

Querer es un acto egoísta; es desear algo que nos interesa, un medio para lograr un fin.
Amar, en cambio, es un acto altruista, pues consiste en dar, siendo un fin en sí mismo.

Queremos cuando sentimos una carencia. Amamos cuando experimentamos plenitud.

Mientras querer es una actitud inconsciente, relacionada con lo que está fuera de nuestro alcance, amar surge como consecuencia de un esfuerzo consciente, que nos hace centrarnos en lo que sí depende de nosotros.

Cuando uno ama no culpa, ni juzga, ni critica, ni se lamenta. Los que aman intentan dejar un poso de alegría, paz y buen humor en cada interacción con los demás, por muy breve que sea.

Amar también es aceptar y apoyar a las personas más conflictivas, porque son precisamente las que más lo necesitan.

Amar de verdad es sinónimo de profunda sabiduría, pues implica comprender que no existe la maldad, tan sólo ignorancia e inconsciencia.

La paradoja es que el amor beneficia primeramente al que ama, no al amado. Así, el amor sana y revitaliza la mente y el corazón de quien lo genera. Por eso recibimos tanto cuando damos……

domingo, 23 de enero de 2011

Nos merecemos el perdón


Comparto con vosotros fragmentos del libro Lecciones de vida de Elisabeth Kübler-Ross y David Kessler.

“A veces los acontecimientos, aun los más trágicos, ocurren sin ser culpa de nadie”

“La psicología de la culpa nace del juicio a nosotros mismos, de la sensación que hemos hecho algo malo”

“Casi siempre, ese penoso juicio a nosotros mismos tiene su origen en lo que nos enseñaron siendo niños”

“Habitualmente nos enseñaron a ser buenos niños, pendientes de satisfacer los deseos de los demás, en vez de forjarnos una clara identidad”

“Nos enseñan a ser dependientes, a dar importancia a las necesidades y vidas de los demás y a descuidar las propias”

“Un síntoma claro de esta dependencia es la incapacidad de decir que no. Nos han enseñado a complacer a los demás y a estar de acuerdo con sus peticiones”

“El deseo de complacer a los demás es un terreno fértil para la culpa, pero no es el único. A veces nos sentimos culpables cuando tratamos de hacer valer nuestra independencia”

“Llegamos a la edad adulta llenos de culpa, y es una culpa poderosa, que nos castiga y que casi nunca sirve para nada”

“Para dejar atrás la culpa, nuestras creencias deben ser coherentes con nuestras acciones”

“Cuando nos sentimos culpables, permanecemos en la estrechez de miras de nuestra mente. Los pensamientos más bajos toman el control. Después de un tiempo nos sentimos avergonzados”

“El remedio es actuar y compartir nuestros sentimientos. Tu verdadero ser no conoce la culpa. Tu verdadero yo está más allá de la culpa de este mundo”

“La culpa que ha herido tu conciencia se convierte en la vergüenza que asalta a tu alma. Como la culpa que la precede, la vergüenza suele enraizarse en la infancia, antes de que supiéramos quienes somos”

“Si había conflicto entre nuestras necesidades y nuestros padres, sentíamos que era el resultado de haber hecho algo malo. Creíamos que actuábamos mal. Así pues, ocultábamos nuestra herida, nuestra rabia y nuestro resentimiento. En el presente, simplemente nos sentimos mal con nosotros mismos”

“La vergüenza en nuestra infancia nos hace sentir más responsables de nuestras situaciones de lo que somos”

“Tal vez en ocasiones nos hemos sentido mal por nuestras acciones, pero esos sentimientos manifiestan en realidad nuestra bondad, ya que los malos no se sienten mal por hacer daño a los demás”

“La paz y la culpa son opuestos”

“Cuando nos aferramos a la culpa, damos la espalda al amor y la paz”

“Podemos reemplazar los sentimientos de culpa por sentimientos de paz”

“Sólo cuando nos liberamos de la culpa nos liberamos realmente del pasado para crear un futuro nuevo”

La clave para sanar es el perdón. Perdonar significa reconocer el pasado y dejarlo ir. Cualquier cosa de la que te sientas culpable puede limpiarse y purificarse con el perdón”

“Cuando te perdonas a ti mismo y a los demás, ya no habrá razón para sentirse culpable. No nos merecemos la culpa; nos merecemos el perdón. Cuando aprendemos esta lección nos hacemos realmente libres

domingo, 16 de enero de 2011

Tú decides ser feliz

 
Comparto con vosotros un texto publicado en el blog osho-maestro.blogspot.com
 
"La infelicidad no tiene nada que ver con una causa exterior, es una decisión interior. Si quieres seguir siendo infeliz, puedes serlo, sea cual sea la situación. Y también es verdad lo contrario. Si decides ser feliz, dichoso, celebrar, puedes serlo, independientemente de las circunstancias."

"No importan las circunstancias, lo importante eres tú, tu actitud. Te pueden dar todo el amor del mundo, pero si tú decides ser infeliz, seguirás siendo infeliz. Y puede suceder que no tengas nada en el mundo, absolutamente nada, y seas feliz, increíblemente feliz, sin razón alguna, porque la felicidad y la infelicidad son decisiones propias."

"Lleva mucho tiempo darse cuenta de eso, porque al ego le resulta muy cómodo pensar que son los demás los que te están haciendo infeliz. El ego no hace más que poner condiciones imposibles, y dice que primero hay que cumplir esas condiciones y que sólo entonces podrás ser feliz. Te dice que cómo puedes ser feliz en un mundo tan horrible, con una gente tan horrible, en una situación tan horrible..."

"Si eres feliz, el amor fluirá hacia ti... no hará falta que lo pidas. Es una de las leyes básicas. Al igual que el agua fluye en dirección descendente y el fuego se mueve en dirección ascendente, el amor fluye hacia la felicidad... en dirección a la felicidad..."

"Sé feliz y verás, de repente todo el mundo estará ahí, disponible. Todos estaban esperando que abrieras tus puertas. El sol, el aire y la fragancia estaban esperando para entrar, pero tú estabas con las puertas cerradas. Abre las puertas"

domingo, 9 de enero de 2011

El juego del más


Comparto con vosotros fragmentos del libro Lecciones de vida de Elisabeth Kübler-Ross y David Kessler.

“Cuando nos decimos que antes no éramos «lo suficiente» y que a partir de ahora seremos «más», entramos en el peligroso juego del «más»”

“Nos decimos que seremos felices cuando poseamos más dinero, cuando tengamos más autoridad en el trabajo, o cuando nos respeten más”

“¿Por qué el mañana parece tener muchas más posibilidades que el hoy para la felicidad o el poder? Porque nos engañamos en el juego del más y perdemos nuestro poder sin importar cómo juguemos”

“Y el juego del más nos mantiene en una posición de carencia, con el sentimiento de no ser suficientemente buenos. Si conseguimos lo que queremos, nos sentimos aún peor porque sigue siendo insuficiente. Aún somos desdichados: si tan sólo tuviésemos un poco más… No nos damos cuenta que la simplicidad es lo que importa”

El verdadero poder, felicidad y bienestar se encuentran en el sublime arte de la gratitud. Sé agradecido por lo que tienes, por las cosas tal como son. Siente agradecimiento por quien eres, por esas cosas que has aportado al mundo con tu nacimiento, por tu unicidad”

“Si no sabes cómo apreciar las cosas y las personas que tienes ahora, ¿crees que serías capaz de valorar otras cosas, otras personas y otro poder cuando los tengas?”

“No podrás, si no has desarrollado tu capacidad de sentir gratitud, si nunca has aprendido a ser agradecido”

“En vez de ello pensarás: «Esta segunda esposa, este segundo millón de dólares, esta casa más grande no son suficientes para mí. Necesito más». Y vivirás siempre así, deseando más o que las cosas sean diferentes de lo que son, jugando al juego del «más» en vez de agradecer todo lo que tienes”

“Cuando la vida es «suficiente», no necesitamos nada más. Que grata sensación nos invade cuando nuestros días son suficientes”

Si no necesitamos nada más, si no nos hace falta controlarlo todo, permitimos que la vida se despliegue