viernes, 1 de octubre de 2010

Libérate de tus miedos


Comparto con vosotros parte de la entrevista realizada en 1989 por Kay Allison a Elisabeth Kübler-Ross publicada en su libro Conferencias – morir es de vital importancia.

"Has de pasar por las muelas de pulir de la vida"

"Cuando la vida te pasa por muelas de pulir, tienes una elección de salir aplastado o pulido. Y si sales pulido entonces la vida te pasa por otras muelas de pulir, hasta que seas un diamante"

"No deseo que la gente tenga que pasar por las tempestades de la vida pero, desgraciadamente, no aprendemos las cosas cuando todo es fácil y va bien. Así que a veces hasta le he dicho a un paciente “no serías empujado a través de las muelas de pulir si no fuera por un propósito”

"Has de ver que estas cosas no ocurren como un castigo de Dios"

"La única manera de que por fin podamos aprender humildad, compasión, compresión, es a través de las tragedias. No lo hemos aprendido de ninguna otra manera y hemos tenido miles de años de posibilidades, no los hemos aprovechado"
 
"Si basas tus elecciones en el miedo, te destruirá. Debes liberarte de tus miedos y aprender qué es el amor, no amor de irse a la cama con alguien, no amor de “te quiero si me compras un abrigo de pieles”. Porque esto no es amor, Amor sin anzuelos (ganchos), sin ataduras, sin condiciones"

"No hace falta ser rico, no tienes que ser listo y tener un doctorado, todo lo que tienes que tener es corazón"

5 comentarios:

  1. Ser molido o machacado... buena reflexión.

    ResponderEliminar
  2. Excelente articulo Manuel. Gracias por ese aporte tan importante y por esa reflexión final que es, en verdad, el resumen de todo en nuestra vida.

    Magnífico. No hay calificativo mejor.

    Saludos
    J.W.M.

    ResponderEliminar
  3. Efectivamente Rafael. Ser molido o machacado sólo depende de nuestra actitud ante la vida.

    ResponderEliminar
  4. Johnny, me alegro mucho que te guste.
    Un abrazote.

    ResponderEliminar
  5. Querido amigo:

    Me he tomado la libertad es exportar tu artículo a Facebook.
    Gracias por compartir a Elisabeth Kübler Ross con todos nosotros.
    Un abrazo.
    Vanessa

    ResponderEliminar