lunes, 30 de noviembre de 2009

Alcanza tu sueño

Comparto con vosotros el texto publicado por Olga Virginia Santos en vidapositiva.com

Sé firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal.

Pero sé paciente, no pretendiendo que todo te llegue de inmediato.

Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno.

Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas.

Espera con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura.

No seas esclavo del pasado y los recuerdos tristes.

No revuelvas una herida que está cicatrizada.

No rememores dolores y sufrimientos antiguos. ¡Lo que pasó, pasó!

De ahora en adelante procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto y camina hacia delante, sin mirar hacia atrás.

Haz como el sol que nace cada día, sin acordarse de la noche que pasó.

Sólo contempla la meta y no veas que tan difícil es alcanzarla.

No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que puedes hacer.

No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.

No trates que otros cambien; sé tú el responsable de tu propia vida y trata de cambiar tú.

Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.

Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su tiempo.

No sufras por lo que viene, recuerda que “cada día tiene su propio afán”.

Busca a alguien con quien compartir tus luchas hacia la libertad; una persona que te entienda, te apoye y te acompañe en ella.

Si tu felicidad y tu vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala, sin pedirle nada a cambio.

Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en ti como en algo precioso.

Desparrama en todas partes la alegría que hay dentro de ti.

Que tu alegría sea contagiosa y viva para expulsar la tristeza de todos los que te rodean.

La alegría es un rayo de luz que debe permanecer siempre encendido, iluminando todos nuestros actos y sirviendo de guía a todos los que se acercan a nosotros.

Si en tu interior hay luz y dejas abiertas las ventanas de tu alma, por medio de la alegría, todos los que pasan por la calle en tinieblas, serán iluminados por tu luz.

Trabajo es sinónimo de nobleza.

No desprecies el trabajo que te toca realizar en la vida.

El trabajo ennoblece a aquellos que lo realizan con entusiasmo y amor.

No existen trabajos humildes.

Sólo se distinguen por ser bien o mal realizados.

Da valor a tu trabajo, cumpliéndolo con amor y cariño y así te valorarás a ti mismo.

Dios nos ha creado para realizar un sueño.

Vivamos por él, intentemos alcanzarlo.

Pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizás entonces necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio radical en nuestras vidas.

Así, con otro aspecto, con otras posibilidades y con la gracia de Dios, lo haremos.

No te des por vencido, piensa que si Dios te ha dado la vida, es porque sabe que tú puedes con ella.

El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino.

Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida.

“Que este día sea el mejor de tu vida para alcanzar tus sueños”

“Sé tu mismo el cambio que quieres ver en el mundo.”

sábado, 28 de noviembre de 2009

Caminos de la vida

Comparto con vosotros el texto publicado por Marian Benedit en vidapositiva.com

Cuando cortas una flor para ti, comienzas a perderla. Porque marchitará en tus manos y no se hará semilla para otras primaveras.

Cuando aprisionas un pájaro para ti, comienzas a perderlo. Porque ya no cantará para ti en el bosque ni criará otros pichones en su nido.

Cuando guardas tu dinero comienzas a perderlo. Porque el dinero no vale por sí, sino por lo que con él se puede hacer.

Cuando no arriesgas tu libertad para tenerla, comienzas a perderla. Porque la libertad que tienes se confirma cuando decides y eliges.

Cuando no dejas partir a tu hijo hacia la vida, comienzas a perderlo. Porque nunca lo verás volver a ti, libre y maduro.

Recuerda siempre: No existe precio por la Libertad. Pero si, una bellísima recompensa para quien la utiliza con grandeza de alma

Aprende en el camino de la vida la paradójica lección de la experiencia: “Siempre ganas lo que dejas y pierdes lo que retienes...”


Mi opinión personal es que en esta vida no podemos retener nada, porque retener es sinónimo de perder.

Resulta durísimo porque muchas veces nos encontramos bien con nuestra familia, nuestros amigos, nuestro trabajo, nuestra situación económica, es decir, estamos "posicionados" pero olvidamos que nada, absolutamente nada, nos pertenece y todo es temporal.

No podemos detener el tiempo, es mejor dejarnos llevar por el río de la Vida con la plena confianza que no andamos solos el camino.

Ser honesto

Comparto con vosotros un artículo publicado en portalplanetasedna.com.ar

 La honestidad forma parte de aquellas cualidades más gratas que puede poseer una persona

La honestidad forma parte de aquellas cualidades más gratas que puede poseer una persona, ella garantiza confianza, seguridad, respaldo, confidencia, integridad. Si alguna vez debemos hacer un listado de las cualidades que nos gustaría encontrar en las personas o mejor aún, que nos gustaría poseer, seguramente enunciaremos la Honestidad.

En este sentido, la honestidad es una forma de vivir congruente entre lo que se piensa y la conducta que se observa hacia el prójimo, que junto a la justicia, exige en dar a cada quien lo que le es debido.

En nuestra vida encontramos a diario actitudes deshonestas como la hipocresía, alguien que aparenta una personalidad que no tiene para ganarse la estimación de los demás; o la mentira; el simular trabajar o estudiar para no recibir una llamada de atención de los padres o del jefe inmediato; el no guardar en confidencia algún asunto del que hemos hecho la promesa de no revelarlo; no cumpliendo con la palabra dada, los compromisos hechos y la infidelidad.

Ser deshonestos nos lleva a romper los lazos de amistad establecidos, en el trabajo, la familia y en el ambiente social en el que nos desenvolvemos. Incluso, la convivencia bajo estos parámetros se torna imposible, pues ésta no se da, si las personas somos incapaces de confiar unos en otros.

Ser honestos significa ser sinceros en todo lo que decimos y hacemos: fieles a las promesas hechas en el matrimonio, en la empresa o negocio en el que trabajamos y con las personas que participan de la misma labor; actuando justamente en el comercio y en las opiniones que damos respecto a los demás. Los que nos rodean esperan que nos comportemos de forma seria, correcta, justa, desinteresada, con espíritu de servicio, pues saben que siempre damos un poco más de lo esperado.

La honestidad puede convertirse en un valor que se viva cotidianamente con los demás, tratando de no perjudicar o herir susceptibilidades, lo cual se puede dar cuando les atribuimos defectos que no tienen o juzgando con ligereza su actuar; incluso, evitando sacar provecho u obtener algún beneficio a costa de sus debilidades o de su ignorancia; procurar no apropiarnos de aquella información importante para la empresa en que trabajamos, o de aquel problema que nos ha confiado nuestro paciente o cliente que ha solicitado nuestra ayuda; tratar de no generar discordia y malos entendidos entre las personas que conocemos; señalando con firmeza el grave error que se comete al hacer calumnias y difamaciones de quienes que no están presentes; devolviendo con oportunidad las cosas que no nos pertenecen y restituyendo todo aquello que de manera involuntaria o por descuido hayamos dañado...

Si realmente pretendemos ser honestos, debemos empezar por enfrentar y asumir con valor nuestros defectos, buscando aquella manera que resulte más eficaz para superarlos, llevando a cabo acciones que mejoren todo aquello que afecta a nuestra persona y como consecuencia, a nuestros semejantes. Ello supone aprender a rectificarnos ante un error y cumplir con nuestras labores grandes y pequeñas sin hacer distinción.

Si podemos gestar un ambiente cálido y confiable, sostenido por relaciones basadas en la honestidad, nos llevará a crecer como personas, espiritualmente, constituyéndonos en verdaderos hombres de bien.

Reserva tiempo

Comparto con vosotros un artículo publicado en deciditriunfar.com

Reserva tiempo para REÍR,
es la música del alma.

Reserva tiempo para LEER,
es la base de la sabiduría.

Reserva tiempo para PENSAR,
es la fuente del poder.

Reserva tiempo para TRABAJAR,
es el precio del éxito.

Reserva tiempo para DIVERTIRTE,
es el secreto de la juventud eterna.

Reserva tiempo para SER AMIGO,
es el camino de la felicidad.

Reserva tiempo para SOÑAR,
es el medio de encontrar tus objetivos.

Reserva tiempo para AMAR Y SER AMADO,
es el privilegio de los hijos de Dios.

Reserva tiempo para SER ÚTIL A LOS OTROS,
esta vida es demasiado corta para que seamos egoístas.

Nosotros no perdemos tiempo en la vida;
lo que se pierde es la vida, al perder el tiempo.

Para no vivir en vano

Comparto con vosotros el texto publicado por Tamara Mercedes en vidapositiva.com

Si consigo evitar que un corazón se rompa o que una vida se pierda, entonces no habré vivido en vano...

Si consigo aliviar el dolor de una vida, calmar una pena, o tan sólo que el pájaro desvalido vuelva a su nido, no habré vivido en vano...

Quien hace algo para ayudar sincera y desinteresadamente a los demás, no ha vivido en vano... “Hay mayor felicidad en dar que en recibir.” El que ha hecho la prueba, puede dar testimonio de ello. Quien comparte con otros, abre las puertas de esa inmensa felicidad que tanto codiciamos los seres humanos...

Vive en vano sólamente aquel que, encerrado en su egoísmo, desperdicia sus talentos y se vuelve estéril... Aquel que pasa distraído o voltea la cara frente al que sufre... El que sólo vive para satisfacer su avaricia y nunca comparte con los demás, ni siquiera parte de lo bueno que hay en él...

Nada de lo que hagamos en esta vida con AMOR y en favor de los demás, será inútil...

Procuremos vivir siempre al servicio de los demás. Independientemente de lo que hagamos con ella, en esta vida cosechamos exactamente aquello que hemos sembrado...

De nada nos servirá que nos afanemos por el trabajo, las apariencias, las riquezas, la fama o el poder, pues todas estas cosas son vanas y perecederas. El AMOR es lo único que permanece...

Al final de nuestras vidas, lo que en verdad tendrá importancia, será la ayuda que prestamos a los demás y todo el AMOR que compartimos con ellos...

Pues de todos modos, las cosas materiales se quedarán, mientras que el AMOR es lo único que podremos transportar con nosotros adondequiera que vayamos...

¡Siembra AMOR por dondequiera que vayas y serás parte de la cosecha divina!

Aliviar el espíritu de los enfermos

Comparto con vosotros un reportaje publicado en el diario El Mundo sobre el primer taller de acompañamiento espiritual para sanitarios.

Me quedo con las frases:

...Cuando la muerte se acepta, se puede llegar a ella con tranquilidad, incluso con gozo...

...La necesidad de atención espiritual no sólo 'pertenece' a las personas religiosas. " Es inherente a todo ser humano. Se trata de acompañar a los pacientes para que pasen de la negación de su final (algunos se resisten a aceptarlo, buscando soluciones en otros países) a la aceptación...

Aprendí y decidí

Comparto con vosotros un texto publicado en la web deciditriunfar.com

Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar…
decidí no esperar a las oportunidades sino yo mismo buscarlas,
decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución,
decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis,
decidí ver cada noche como un misterio a resolver,
decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz.

Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades,
y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnos,
Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar,
Descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui,
Me dejó de importar quién ganara o perdiera,
ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer.

Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino jamás dejar de subir.
Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener,
es tener el derecho de llamar a alguien “Amigo”.
Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento,
“el amor es una filosofía de vida”.

Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados
y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente.
Aprendí que de nada sirve ser luz
si no vas a iluminar el camino de los demás.

Aquel día decidí cambiar tantas cosas...
Aquel día aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad,
desde aquel día ya no duermo para descansar...
ahora simplemente duermo para soñar.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Principio del vacío

Comparto con vosotros el texto publicado por Marian Benedit en vidapositiva.com

Tienes el hábito de juntar objetos inútiles creyendo que un día, quién sabe cuándo, vas a necesitarlos?

Tienes el hábito de juntar dinero sólo para no gastarlo pues piensas que en el futuro podrá hacerte falta?

¿Tienes el hábito de guardar ropa, zapatos, muebles, utensilios domésticos y otras cosas del hogar que ya no usas desde hace mucho tiempo?

Y dentro de ti ¿tienes el hábito de guardar broncas, resentimientos, tristezas, miedos y demás?

No hagas eso. Va contra tu prosperidad

Es preciso que dejes un espacio, un vacío, para que cosas nuevas lleguen a tu vida.

Es preciso que te deshagas de todo lo inútil que hay en ti y en tu vida para que la prosperidad llegue.

La fuerza de ese vacío es lo que absorberá y atraerá todo lo que deseas.

Mientras estés emocional y materialmente cargando sentimientos viejos e inútiles no tendrás espacio para nuevas oportunidades.

Los bienes necesitan circular. Limpia los cajones, los armarios, el garaje. Da lo que ya no uses. La actitud de guardar cosas inútiles encadena tu vida.

No son los objetos guardados los que estancan tu vida sino el significado de la actitud de guardar.

Cuando se guarda se considera la posibilidad de falta, de carencia. Se cree que mañana podrá faltar. Que no tendrás manera de cubrir esas necesidades.

Con esa idea le estás mandando dos mensajes a tu cerebro y a tu vida: Que no confías en el mañana y que piensas que lo nuevo y lo mejor NO son para ti. Por eso te alegras guardando cosas viejas e inútiles.

Deshazte de lo que ya perdió el color y el brillo, deja entrar lo nuevo a tu casa y dentro de ti mismo.

Joseph Newton

viernes, 20 de noviembre de 2009

Estoy Aprendiendo

Comparto con vosotros el texto publicado por Emy en vidapositiva.com

Estoy aprendiendo a aceptar a las personas, aun cuando ellas me decepcionan, cuando huyen del ideal que tengo para ellas, cuando me hieren con palabras ásperas o acciones impensadas.

Es difícil aceptar las personas como ellas son, sin que sean como deseamos que ellas sean. Es difícil, muy difícil, pero estoy aprendiendo.

Estoy aprendiendo a amar. Estoy aprendiendo a escuchar. Escuchar con los ojos y oídos. A escuchar con el alma y con todos los sentidos. Escuchar lo que dice el corazón, lo que dicen los hombros caídos, los ojos, las manos inquietas. Escuchar el mensaje que se esconde por entre las palabras vanas, superficiales. Descubrir la angustia disfrazada, La inseguridad mascarada, la soledad encubierta.

Penetrar la sonrisa fingida,la alegría simulada, la vanagloria exagerada. Descubrir el dolor de cada corazón. Poco a poco, estoy aprendiendo a amar. Estoy aprendiendo a perdonar. Pues el amor perdona, quita los rencores, y cura las heridas que la incomprensión e insensibilidad lo lastimaron.

El amor no alimenta resentimientos con pensamientos dolorosos. No cultiva ofensas con lástimas y autoconmiseración. El amor perdona, olvida, extingue todos los esquicios de dolor en el corazón.

Poco a poco...

Estoy aprendiendo a perdonar. Estoy aprendiendo a descubrir el valor que se encuentra dentro de cada vida, de todas las vidas. Valor soterrado por el rechazo, por la falta de comprensión. Cariño y aceptación, por las experiencias desagradables vividas a lo largo de los años. Estoy aprendiendo a ver,en las personas su alma, y las posibilidades que Dios les dio.

Estoy aprendiendo,

¡Pero cómo es de lento el aprendizaje!, ¡Cómo es difícil amar, amar como Cristo amó! Todavía, tropezando, errando, estoy aprendiendo... Aprendiendo a no ver solamente ...mis propios dolores, mis intereses, mi ambición, mi orgullo, cuando estos impiden el bienestar y la felicidad de alguien !

Cómo es difícil amar, pero estoy aprendiendo!!.

domingo, 1 de noviembre de 2009

La comodidad se encuentra en el camino

Comparto con vosotros el anuncio del Ford Explorer en Venezuela, sin ánimo de hacer propaganda.

Anuncio Ford Explorer

“Me gustaría que cuando estén en ese momento de sus vidas en que sienten que tienen todo lo que han soñado, que están tan cómodos como siempre han querido, se pregunten:

¿Pudiese tener un trabajo mejor?

¿Y si hago un esfuerzo?

¿Y si monto un negocio propio y comienza a crecer?

Pídanle a la persona que aman que se case con ustedes, y si ya lo hicieron vuélvanselo a pedir.

Acuérdense de los aniversarios, llévenlos al teatro, háganles el desayuno…

Cuenten un chiste malo, uno como:

¿Cómo se dice espejo en chino?

AHÍ TOY YO

¡Exacto!!!

Sientan vergüenza, apaguen el aire acondicionado de vez en cuando y dejen de bañarse en tres días.

Escriban una película, escriban un libro.

Aprendan un idioma nuevo.

Coman hindú, coman hormiga, coman con las manos… Discutan cuando tengan razón.

Aprendan a pedir perdón…

Traten bien, a quienes los tratan mal.

Enseñen con el ejemplo.

Cómprense lo que siempre han querido… ¡Y véndanlo!!!

Váyanse al Roraima y quédense sin aire.

Cuestionen todo…

No se vayan a dormir, sin tener algo en que soñar.

Esta prohibido que un día se parezca a otro.

Y nunca, pero nunca piensen, que la comodidad se encuentra en un lugar.

La comodidad se encuentra en el camino.” 

Trabajar menos para vivir más

Comparto con vosotros un reportaje publicado en el diario El País que habla del Downshifting como filosofía de vida.

El movimiento social Downshifting propone redescubrir lo verdaderamente valioso de la vida para recuperar el contacto con la felicidad perdida.